COMPARTIR HISTORIAS CONSTRUYE UN PUENTE RELACIONAL QUE JESUS PUEDE CRUZAR, DE TU CORAZON AL DE OTROS. 1 Juan 5:10a







vErSíCuLo sEmAnAl

"Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos".

1 Timoteo 6:18









26/5/11

Lugar equivocado


Alguna vez escuche esta historia y hace poco la recordé:

Un sabio encontró a un muchacho cuando éste estaba buscando algo de rodillas.
"¿Qué andas buscando muchacho?"
- Mi llave la he perdido
Y arrodillados los dos, se pusieron a buscar la llave perdida. Al cabo de un rato dijo el sabio:
"¿Dónde la perdiste?"
- En casa
"¡Santo Dios! Y entonces, ¿Porque la buscas aquí?
- Porque aquí hay luz.

Me he puesto a pensar que esto nos pasa a muchos de nosotros o tal vez a todos, no lo se. Lo que se es que las experiencias diarias en la vida en algunas ocasiones han sido desagradables, dolorosas y con un cierto sentir de desencanto.

En algunas ocasiones has fallado y la culpa invade todo tu ser, en otras piensas estar tan bien delante del Señor que te dedicas a ver los tropiezos de otros.

¿No es verdad?

Sea cual sea la razón lo cierto es que a veces perdemos nuestra llave.

¿De que vale buscar a Dios en lugares santos si donde lo has perdido ha sido en tu corazón?

Piensa en lo que haces, pero sobre todo cuida y guarda tu corazón porque de el mana la vida (Prov. 4:23) y examina si aun esta el Señor en el.
Con amor en Cristo

4/5/11

Da amor, recibirás amor


Tal vez esto te pasa a ti o a alguien muy cerca de ti…

Fue una vez un muchacho, el primero en todo, mejor atleta, mejor estudiante, pero lo que nunca supo fue si era buen hijo, un buen compañero o un buen amigo. En un día de depresión el muchacho se dejo morir. Cuando iba camino al cielo se encontró con un ángel y este le preguntó: “¿Porqué lo hiciste? si sabías que te querían…”, a lo que El respondió: “hay veces que vale mas una sola palabra de consuelo que todo lo que se sentía … en tanto tiempo nunca escuché: estoy orgulloso de ti… gracias por se mi amigo… ni siquiera un te quiero mucho…”

Al quedar pensativo el ángel, el muchacho añadió: ¿Y sabes que es lo que mas me duele?, el ángel triste le pregunta: ¿Qué?, a lo que el le responde: “que todavía espero oírlo algún día…

Luego de esto el ángel abrazó al muchacho y le dice que no se preocupe porque se acerca a la única persona que siempre le dijo al oído que lo amaba pero el nunca lo escucho, pero lo espera con los brazos abiertos.

Muchas veces sucede esto en nuestra vida parece ser que damos lo mejor de nosotros y nunca hemos recibido una palabra de consuelo.

Pero sabes lo maravilloso es que tenemos a Alguien que aunque no lo vemos nos ama con una devoción que nunca podremos comprender debido a nuestra condición de pecadores. Ese Alguien es DIOS Padre pues no escatimo ni a su propio Hijo, sino lo entrego por ti y por mi (Ro. 8:32). Su amor excede todo conocimiento (Ef. 3:18-19)

Ahora ya lo sabes Cristo te espera a cada momento con los brazos abiertos diciéndote de mil formas que te ama.

¿Qué haces tu por El? ¿Le amas? Demuéstralo.

Con amor en Cristo